miércoles, 30 de enero de 2013

Llueve en París


Suele pasar que cuando no coges el paraguas es el día que llueve ¿verdad ? Pues sí, eso me ha pasado hoy. Llevaba el bolso lleno con mis apuntes de la academia y he sacado el paraguas (he decidido sacrificarlo porque no lo estaba utilizando).

Nada más salir de casa me he dado cuenta de que había sido una muy mala idea. Pero no había vuelta atrás.

Era raro que lleváramos días sin llover, así que ya tocaba.

La gente está acostumbrada y por cuatro gotas no saca el paraguas. Yo no logro estar a gusto intentando ver a través de ese « chiribiri » continuo y molesto.

Vista desde un café
En Valencia cuando caen dos gotas la ciudad se paraliza, el tráfico se atasca y todo es un caos. Aquí no, podríamos decir que sucede eso cuando nieva, pero no cuando llueve.

La ciudad parece más triste con la lluvia
Tendré que ir haciéndome a la idea. Es raro ver cómo estos días en Valencia hace más de veinte grados y la gente va a la playa. Con gusto cambiaría el tiempo de aquí por el de allá.
 


El mercado de Place de Monge
Pleut et c'est ennuyeux!

No hay comentarios:

Publicar un comentario